El cumplido

El cumplido es una estrategia de cortesía eficaz para introducir un acto de habla que amenaza la face negativa del oyente. El objeto ilocutivo del cumplido se deriva de un objeto social general que consiste en crear o mantener un ambiente de amabilidad. Los hablantes que emiten un cumplido tienen por fin expresar solidaridad y aprecio, así como establecer un contexto interaccional que facilite la colaboración entre los interlocutores.
El cumplido es un poderoso instrumento persuasivo en aquellos tipos de interacción en que el balance coste-beneficio puede ser objeto de negociación. Incluso en contextos no exhortativos, el cumplido puede inducir al interactante a quien va dirigido a sentirse obligado a compensar al que lo ha emitido, de acuerdo con el principio normativo de noblesse oblige.
En el cumplido es importante el género, el contexto, la jerarquía... Es muy diferente entre los hombres y las mujeres.
Hay que diferenciar el cumplido de la felicitación. El cumplido supone, excepto en contados casos como en el piropo, la participación activa del interlocutor en el estado de cosas descrito, mientras que la felicitación se refiere a estados de cosas en cuya realización el interlocutor ha participado activa o pasivamente.